La conductora de televisión y ex reina de belleza de Guayaquil, Karime Borja, enfrenta el momento más devastador de su vida tras la muerte de su hijo, Mateo Lapo Borja, de sólo cuatro años.
El niño había tenido un gravísimo accidente en noviembre de 2021, tras caer a una piscina y permanecer durante 15 minutos sin signos vitales.
Aunque fue rescatado y reanimado por los servicios médicos, el prolongado tiempo sin oxígeno le causó una lesión cerebral por hipoxia isquémica, lo que marcó el inicio de una larga batalla.
Durante los últimos años, Mateo pasó por múltiples internaciones y tratamientos en la Unidad de Cuidados Intensivos, mientras su familia y médicos mantenían la esperanza de una mejoría.
La hipoxia isquémica cerebral es una afección grave que ocurre cuando el cerebro no recibe suficiente oxígeno. Esta falta de oxígeno interrumpe el funcionamiento normal del cerebro y puede causar daños permanentes si no se trata a tiempo.
Algunos de los síntomas más comunes incluyen pérdida de memoria, problemas de coordinación, convulsiones, aumento de la frecuencia cardíaca, desmayos, dificultades en el habla y problemas visuales.
Campaña de concientización
La reconocida modelo ecuatoriana, de 26 años, se sinceró en diversas ocasiones a través de sus redes sobre lo que estuvo viviendo durante todos estos años. Tras el accidente de su pequeño se alejó del foco mediático, pero eventualmente volvió a reaparecer en televisión, una vez la situación estuvo más estabilizada.
El pasado mes de diciembre, la modelo quiso llevar a su hijo para que probase un tratamiento innovador y prometedor en México, por lo que el canal TC Televisión se puso manos a la obra con la campaña Corazones unidos por Mateíto para recaudar fondos para tal fin. A pesar de los esfuerzos de los médicos, las secuelas del accidente terminaron por deteriorar la salud del pequeño, hasta que el pasado 17 de septiembre su vida se apagó.
La muerte del pequeño Mateo marcó para siempre a su madre y su familia, quienes no dudaron en “celebrar la vida” del niño el pasado 19 de septiembre, con una pequeña ceremonia a orillas del mar.
Borja también quiso agradecer todos los mensajes de cariño y apoyo recibidos durante estos difíciles años. “Te amo para siempre, Mateo”, escribió en una emotiva publicación en Instagram, acompañada de fotos de su hijo.
Dayanna Ivelice, integrante del personal médico que estuvo a cargo de los cuidados del niño, también dedicó un sentido mensaje al pequeño.
“Fuiste y siempre serás mi mejor amigo, y claro que extrañaré en Navidad ver películas juntos y ponerte tu ropita navideña, pasearte en tu cochecito, engreírte hasta que te quedes dormidito, contarte hermosas historias al oído, orar juntos, adorar a Dios y llenarte de mucho amor, mi niño valiente. Ahora descansa, vuela alto, pronto nos vemos, mi niño de luz”.
Dolor en las redes
La modelo también creó un podcast, “Cara a cara con mi peor pesadilla”, en el que habla de su experiencia y cómo afrontó todo el proceso. “Sentí que mi alma se desprendió de mi cuerpo, no puedo describir tanto dolor”, confesó.
“Tienes contigo ese dolor todos los días y lo transformas en algo que te funcione. Descuidarme no era una opción. Si no, hoy sería como una persona muerta en vida, si me dejara llevar por mis pensamientos negativos y dolorosos”, apuntaba.
Desde el grave incidente sufrido por el pequeño, Borja se convirtió en una de las personas más vocales en la concientización sobre los peligros de este tipo de accidentes. La modelo pidió a los padres que enseñen a nadar a sus hijos desde pequeños, además de instar a poner cercas alrededor de las piscinas para evitar un destino fatal. También trata de llamar la atención sobre la importancia de valorar a los cuidadores de enfermos, personas con discapacidades y ancianos.