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Cómo guardar las hojas de espinaca para que no se dañen


Suele pasar que la espinaca que se veía tan verde, turgente y fresca en la góndola del almacén, se convierta en una masa amorfa, ennegrecida y húmeda a los pocos días de aterrizar en la heladera.

O bien que, al querer aprovechar la clásica oferta de 2 paquetes por 1, se termine generando la difícil misión de llegar a usar el segundo ramo antes de que empiece a marchitarse. Como una carrera contra los tiranos tiempos de la espinaca.

Nos pasa a todos. Guardar las hojas de espinaca sin que se dañen parece ser un secreto que pocos conocen…y que se lo guardan muy bien. Hasta ahora.

En esta nota, veremos los mejores trucos para que comprar espinaca no sea una trampa y se pueda aprovechar por mucho más tiempo todos los beneficios que esta noble verdura tiene para dar.

Cómo guardar las hojas de espinaca sin que se dañen

Si bien en el mercado hay empresas que seducen con la propuesta de comprar la espinaca ya limpia, cortada y empaquetada, económica (y ecológicamente) estas no son las mejores alternativas.

Por eso, lo primero a tener en cuenta para lograr que la espinaca dure más tiempo “linda” es saber elegirla.

La espinaca es rica en nutrientes como vitamina A, C, K y ácido fólico. También en minerales como hierro y calcio. Foto: Unsplash.La espinaca es rica en nutrientes como vitamina A, C, K y ácido fólico. También en minerales como hierro y calcio. Foto: Unsplash.

En la verdulería hay que entrenar el ojo para seleccionar las ramos más verdes (de un verde intenso, cero amarillento) y con un tono uniforme.

Las hojas deben estar sin magulladuras o roturas. Y, al tocarlas, tienen que ofrecer un poco de resistencia. Si se doblan o arrugan con mucha facilidad es porque ya están viejas.

Además, las hojas deben estar completamente secas. Si de entrada vienen mojadas, la humedad acumulada hará que comiencen a dañarse con mayor velocidad y reducir sus días de esplendor.

Hay que saber que las hojas de espinaca tienen un alto contenido de agua, que representa aproximadamente entre el 90 y el 93% de su peso.

Esto explica por qué son tan ligeras en calorías y se reducen tanto en tamaño cuando se cocinan. Y también, por qué son tan propensas a descomponerse cuando se les suma aún más humedad.

Siguiendo esta línea, la primera opción será lavar las hojas recién al momento de consumirlas, para asegurarse de no guardar las hojas restantes con humedad. Y, en la heladera, el lugar indicado son los cajones de la parte baja, donde la temperatura las mantendrá en bueno estado, por más tiempo.

En la verdulería se deben elegir hojas de espinaca de un color verde intenso.En la verdulería se deben elegir hojas de espinaca de un color verde intenso.

Ahora bien, en el caso que se prefiera guardarlas ya lavadas, entonces habrá que seguir los siguientes pasos:

  1. Limpiarlas bien, una por una, para eliminar todo el resto de tierra y suciedad que pudieran tener. Lo mejor será hacerlo bajo el chorro de la canilla, con cuidado de no romperlas.
  2. Luego, escurrirlas y dejarlas secar completamente sobre un paño de cocina limpio y absorbente. Ayuda mucho secar las hojas, una por una.
  3. Recién cuando estén bien secas, lo siguientes será guardarlas dentro de un recipiente hermético. En este punto, se podrán ir armando capas de hojas (sin apretarlas mucho), separadas por láminas de papel de cocina, para que absorban los restos de humedad que les pudiera haber quedado.

Lo que determinará que las hojas de espinaca se mantengan sin daño por más tiempo será que no queden mojadas o húmedas tras el lavado. También hay que saber que, en general, pueden llegar a durar hasta cinco días antes de que comiencen a mostrar signos de oxidación.

Dos manojos de espinaca cruda es la medida adecuada para una persona.Dos manojos de espinaca cruda es la medida adecuada para una persona.

Puede parecer mucho trabajo, pero lo cierto es que vale la pena hacerlo ya que la espinaca le ofrece al cuerpo importantes beneficios para la salud.

Estos son los 10 beneficios más destacados:

  1. Rica en nutrientes esenciales. La espinaca contiene vitamina A, C, K y ácido fólico, además de minerales como hierro, calcio, magnesio y potasio. Estos nutrientes son esenciales para mantener la salud general del cuerpo.
  2. Promueve la salud del corazón. Gracias a su contenido de nitratos naturales, la espinaca puede ayudar a reducir la presión arterial, mejorando la circulación sanguínea y reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  3. Apoya el sistema inmunológico. Su alta cantidad de vitamina C y antioxidantes fortalece el sistema inmunológico, ayudando al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades.
  4. Favorece la digestión. La espinaca es una excelente fuente de fibra, lo que contribuye a una digestión saludable, previniendo problemas como el estreñimiento y manteniendo un tracto intestinal regular.
  5. Mejora la salud ocular. Es rica en luteína y zeaxantina, dos antioxidantes importantes que ayudan a proteger los ojos del daño causado por la luz y pueden prevenir enfermedades oculares relacionadas con la edad, como las cataratas y la degeneración macular.
  6. Respalda la salud ósea. Su contenido de vitamina K es esencial para la salud de los huesos, ya que esta vitamina ayuda en la absorción de calcio y en la mineralización ósea.
  7. Es fuente de energía. Aunque no contiene tanto hierro como se pensaba popularmente, aún es una fuente decente de hierro no hemo, que es necesario para transportar oxígeno en la sangre y prevenir la fatiga.
  8. Tiene propiedades antiinflamatorias. Contiene compuestos antioxidantes, como los flavonoides, que tienen efectos antiinflamatorios, lo que puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la artritis y las enfermedades cardíacas.
  9. Apoyo a la salud del cerebro. Los antioxidantes presentes en la espinaca también pueden tener efectos protectores sobre el cerebro, ayudando a prevenir el envejecimiento cognitivo y mejorando la función cerebral.
  10. Control de peso. Por ser baja en calorías y alta en fibra, la espinaca es ideal para dietas de control de peso, ya que proporciona saciedad sin aportar demasiadas calorías.
Para que dure más, al comprarla, asegurarse de que las hojas de espinaca estén secas.  Para que dure más, al comprarla, asegurarse de que las hojas de espinaca estén secas.

No hay dudas, la espinaca es una de las verduras más saludables. Y, aunque mantenerla fresca tiene sus trucos, ahora ya todos sabemos cuáles son.



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