El Ginkgo biloba, como cuenta un informe de la Clínica Mayo, es una de las especies de árbol vivo más antigua. Además, de sus inconfundibles hojas con forma de abanico se obtiene el extracto que puede contribuir a regular la presión arterial y activar la circulación entre otras acciones.
El secreto de sus efectos terapéuticos, indica la misma nota, está en sus dos principales compuestos químicos.
Por un lado, los flavonoides resultan uno de los más potentes antioxidantes.
A esto se suma el efecto de los terpenoides. Estas sustancias encargadas de contribuir a mejorar la circulación, dilatando los vasos sanguíneos y reduciendo la viscosidad de las plaquetas. Estas propiedades son fundamentales para regular la presión arterial.
Además, contiene componentes activos llamados ginkgólidos. Estos inhiben la activación de las plaquetas y, por ende, la coagulación sanguínea. Dicho mecanismo es especialmente beneficioso para personas que sufren de várices y pesadez de piernas o tienen una predisposición a la formación de coágulos y otros trastornos circulatorios.
También existen algunos estudios que indican que puede mejorar la memoria en adultos sanos. Aunque no resultaría efectivo en casos de demencia u otras enfermedades que afecten lo cognitivo.
Una de las opciones para aprovechar estos efectos es preparar iinfusiones caseras.
Los pasos que recomienda Mundo Deportivo son los siguientes.
La infusión ya estará lista para tomar.
La recomendación de la nota de Mundo Deportivo es consumir dos tazas al día después de las comidas. No conviene superar esa dosis ya que un consumo excesivo podría ocasionar algún tipo de reacción alérgica, dolores de cabeza o molestias estomacales.
También existen comprimidos concentrados de este extracto. En este caso, deben seguirse las indicaciones y advertencias sobre posibles contraindicaciones.
A pesar de ser bien tolerado, existen algunas advertencias sobre su consumo. Estas son algunas de ellas.
Tampoco están recomendadas las semillas crudas o tostadas, ya que pueden resultar tóxicas.
Vale aclarar que estas indicaciones son orientativas y no sustituyen el tratamiento médico. Ante una duda o situación puntual de salud, es importante consultar a un especialista.